Declaración de Kigali sobre las Enfermedades Tropicales Desatendidas
La lucha contra las enfermedades tropicales desatendidas (ETDs), un grupo de 20 enfermedades debilitantes, desfigurantes y potencialmente mortales, ha experimentado un avance increíble. Cuarenta y tres países han eliminado por lo menos una ETD, 600 millones de personas ya no requieren tratamiento para las ETDs, y los casos de algunas de estas enfermedades que han afectado a la humanidad durante siglos, como la enfermedad del sueño y la enfermedad del gusano de Guinea, han alcanzado un mínimo histórico, lo que prueba que es posible acabar con las ETDs[1].
Aunque este éxito se debe a multitud de factores, son sobre todo dos los que resultan especialmente importantes si se pretende continuar avanzando.
El primero es la apropiación por parte de los países y regiones afectadas. Si los países no hubiesen abrazado los objetivos internacionales, traduciéndolos en estrategias nacionales para después cumplirlos, el avance alcanzado no hubiera sido posible. Es esencial que los países continúen liderando y apropiándose de la lucha contra las ETDs si pretendemos seguir viendo resultados tangibles a gran escala.
El segundo, las asociaciones y colaboraciones entre una gran variedad de actores han definido los avances para acabar con las ETDs. Esto incluye a la asociación público-privada más grande del mundo, en la que socios del sector, países donantes, filántropos particulares, centros de investigación y la sociedad civil subscriben la Declaración de Londres sobre las ETDs[2] y apoyan el lanzamiento de la primera hoja de ruta de las ETDs de la Organización Mundial de la Salud (OMS)[3]. Esta asociación debe continuar ampliándose y avanzando, teniendo como protagonistas centrales a los países y comunidades afectadas. Únicamente, mediante una acción coordinada y colaborativa en la que cada contraparte asuma su rol, podremos alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU y los de la hoja de ruta de las ETDs de la OMS para el año 2030, como por ejemplo la erradicación en todo el mundo de dos enfermedades (la enfermedad del gusano de Guinea y el pián) y la eliminación de por lo menos una ETD en 100 países.
Si bien los esfuerzos para abordar las ETDs constituyen historias de éxito en el campo de la salud global, todavía queda mucho trabajo por hacer antes de acabar por completo con las ETDs en todo el mundo[4] (estas enfermedades actualmente todavía afectan a 1,7 mil millones de personas). La COVID-19 también ha afectado a los servicios esenciales de salud en todo el mundo, perturbando especialmente los programas de lucha contra las ETDs. La COVID-19 también ha puesto de manifiesto la importancia vital de invertir en potentes sistemas de salud primaria que puedan responder a enfermedades endémicas como las ETDs y, a la vez, contribuir a que el mundo sea más resiliente a las pandemias.
Se necesita una acción concertada para evitar que la COVID-19 y futuras pandemias arruinen años de progreso y expongan a millones de niños a enfermedades prevenibles. Tenemos la gran oportunidad en estos momentos de cambiar la vida de las personas afectadas por las ETDs, que a menudo se ven atrapadas en ciclos de extrema pobreza al no poder ir a la escuela o a trabajar. Estas enfermedades pueden prevenirse o tratarse, así que está en nuestras manos poner fin a las ETDs.
Por lo tanto, cada uno de nosotros nos comprometemos a asumir nuestra parte como contrapartes y a nivel comunitario, nacional, regional y global para asegurar que para el año 2030 las ETDs hayan sido controladas, eliminadas y erradicadas.
Declaración de Kigali sobre las Enfermedades Tropicales Desatendidas
Basándonos en el progreso que supone la Declaración de Londres sobre Enfermedades Tropicales Desatendidas (ETDs) y situando a las personas y las comunidades en el centro de la respuesta a las ETDs, nosotros, los signatarios de esta declaración, acordamos conjuntamente acabar con las ETDs[5].
Reconocemos que las ETDs son enfermedades de la pobreza y la desigualdad. Luchando contra las ETDs podemos reducir la pobreza, abordar las desigualdades, reforzar los sistemas de salud, aumentar el capital humano y construir comunidades resilientes, acercándonos a la meta de conseguir una cobertura de salud universal y los ODS. Esta declaración compete y sirve a los 1,7 mil millones de personas que continúan padeciendo las ETDs.
Todos los signatarios de esta declaración se comprometen a alcanzar la meta de los ODS[6] sobre las ETDs y a apoyar el lanzamiento de la hoja de ruta de las ETDs de la OMS para el año 2030: Poner fin a la desatención para alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible: una hoja de ruta para las enfermedades tropicales desatendidas 2021-2030[7]. Subscribimos conjuntamente el principio de ‘no causar daño’ (‘do no harm’) y cumplir nuestros compromisos y aportaciones descritas en esta declaración:
● Trabajando para asegurar que programas de lucha contra las ETDs y los procesos de toma de decisiones se centran en las personas afectadas, especialmente las mujeres y las niñas, personas discapacitadas y minorías y grupos infra representados.
● Constituyéndonos en defensores y embajadores de la lucha contra las ETDs, incrementando el reconocimiento y la relevancia de las ETDs a nivel local, nacional, regional y global y asegurando que las ETDs son una prioridad a los niveles más altos.
● Sosteniendo un enfoque multisectorial y multidisciplinario para luchar contra las ETDs, incluyendo Una Sola Salud (One Health), que reconoce las interacciones de la salud humana, animal y medioambiental y un contexto social, cultural y económico más amplio.
● Incrementando la provisión de servicios que permitan un acceso equitativo a la gestión de la morbilidad, la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de las ETDs.
● Desbloqueando recursos nacionales, incluyendo el refuerzo de la infraestructura de salud pública para implementar programas de lucha contra las ETDs, complementados con recursos externos.
● Identificando oportunidades de financiación sostenibles y administrando los recursos disponibles para maximizar el impacto y la rentabilidad.
● Velando para que trabajar de forma coordinada e integrada constituya la base de los sistemas de salud primaria y esté incorporado a unos sistemas nacionales resilientes al servicio de las comunidades afectadas.
● Invirtiendo e innovando en nuevos medicamentos y diagnósticos para áreas priorizadas en la hoja de ruta de las ETDs de la OMS para el 2030 y, cuando se considere apropiado, facilitando la financiación y transferencia tecnológica para asegurar que hay un abastecimiento sostenible de materias primas para las ETDs.
● Mejorando la recogida y uso de datos para abordar los programas, incrementar su eficacia y acelerar el progreso.
● Monitoreando y reportando de forma transparente el progreso alcanzado respecto a los compromisos y aportaciones descritas en esta declaración, a fin de que cada uno asuma su responsabilidad y apoye la apropiación nacional de los programas de lucha contra las ETDs a nivel de país.
Trabajando juntos, adoptando enfoques centrados en las personas e interactuando entre los diferentes sectores, podemos alcanzar y sostener la meta de los ODS sobre las ETDs y los objetivos de la hoja de ruta de las ETDs de la OMS para 2030. Podemos erradicar dos enfermedades, eliminar por lo menos una enfermedad en 100 países y reducir el número de personas que requieren intervenciones por ETDs en un 90%. Estos compromisos ayudarán a aliviar el sufrimiento, disminuir las causas de la pobreza asociadas a la salud, reducir las discapacidades y el estigma y mejorar el bienestar mental y la inclusión en la sociedad.
Compromisos y aportaciones de los actores signatarios
Alcanzar los objetivos marcados en esta declaración depende de que todos los actores trabajen conjuntamente y cumplan con sus obligaciones. La aportación de cada uno de los actores es única y vital. Colectivamente esto se traduce en avances.
Como gobiernos nacionales
Nos comprometemos a mostrar liderazgo político y apropiación a nivel de país:
● Incorporando las intervenciones de los programas de lucha contra las ETDs en nuestros sistemas nacionales de salud.
● Asegurando que se da prioridad a los programas de prevención, diagnóstico y tratamiento de las ETDs y que éstos cuentan con suficientes recursos y están totalmente integrados en los planes estratégicos nacionales de salud y que los ministerios relacionados (como el de agricultura, salud veterinaria, agua y saneamiento, asuntos familiares y de género y medioambiente), se guían por el enfoque de Una Sola Salud (One Health).
● Aportando los fondos suficientes para las intervenciones de lucha contra las ETDs y adquiriendo compromisos al respecto.
● Maximizando el impacto de las donaciones de medicamentos para las ETDs por parte del sector farmacéutico, asegurando la disponibilidad de los recursos necesarios para su distribución.
● Mejorando la vigilancia y mapeo de enfermedades y la forma como se recogen y usan los datos, incluyendo una mejor digitalización, para destinar y distribuir mejor las donaciones de medicamentos.
● Acabando con las barreras al acceso, como por ejemplo los aranceles sobre donaciones de medicamentos para las ETDs y así asegurar que estos medicamentos se distribuyen a las comunidades vulnerables de forma oportuna.
● Desarrollando políticas de salud pública sobre prevención y tratamiento de las ETDs.
● Asegurando que existen sistemas de información sobre gestión sanitaria para gestionar los programas de lucha contra las ETDs y proporcionar un reporte financiero y programático sobre los indicadores de actuación clave a nivel nacional para estos programas.
● Reportando sobre el progreso respecto a las ETDs a nivel nacional como parte de los mecanismos de seguimiento y revisión para la Agenda para el Desarrollo Sostenible 2030[8].
● Pasando de recibir donaciones de medicamentos a gran escala a proporcionar diagnósticos y medicamentos esenciales asequibles dentro de nuestros propios sistemas de salud, empezando por los que más se necesitan y utilizando recursos domésticos en colaboración con el sector privado (la sostenibilidad dependerá de continuar recibiendo estas donaciones a corto plazo, pasando poco a poco a medicamentos y diagnósticos financiados y abastecidos localmente a medio – largo plazo.)
Como Parlamentarios
Nos comprometemos a:
● Utilizar el poder político a nuestro alcance para sensibilizar sobre el coste humano de las ETDs, enfermedades que `pueden prevenirse y tratarse.
● Proponer y adoptar legislaciones y presupuestos que muestren la voluntad política, el liderazgo y la rendición de cuentas respecto a la eliminación de las ETDs[9].
● Incrementar la sensibilización sobre los beneficios para la seguridad sanitaria global de apoyar programas de lucha contra las ETDs a nivel nacional.
Como alcaldes y líderes de gobiernos locales de los países afectados
Nos comprometemos a:
● Utilizar nuestra posición como intermediarios entre las autoridades nacionales y las comunidades locales para acelerar el desarrollo rural y urbano integrado y crear entornos prósperos y saludables.
● Involucrar y empoderar a las comunidades y a sus líderes para que identifiquen los retos en materia de salud pública a nivel local, como por ejemplo las ETDs y sus factores de riesgo locales persistentes.
● Encontrar soluciones locales basadas en evidencias para luchar contra las ETDs y otros desafíos en materia de salud pública y rendir cuentas respecto a su implementación.
● Coordinar servicios en todos los sectores para mejorar el entorno creado, incluyendo vivienda, desarrollo y mantenimiento de infraestructuras, agua y saneamiento, y eliminación segura de residuos medioambientalmente, para reducir la transmisión de las ETDs y otras enfermedades transmisibles.
● Trabajar con las organizaciones de la sociedad civil (que constituyen un puente importante entre el gobierno local y las comunidades de difícil acceso), gobiernos nacionales, el sector privado y otros actores clave para acabar con las ETDs[10].
● Asegurar que las mujeres, la juventud, las personas discapacitadas y las minorías y grupos infra representados están incluidos en la toma de decisiones y políticas.
Como entidades regionales y continentales
Nos comprometemos a:
● Proporcionar liderazgo político para el reconocimiento de las ETDs como prioridades en materia de desarrollo y salud en nuestras regiones.
● Apoyar acciones multisectoriales coordinadas contra las ETDs en nuestros estados miembros.
● Revisar el progreso para acabar con las ETDs[11] y tomar las medidas oportunas para corregir el curso en caso necesario.
● Celebrar cuando los países alcancen un hito clave.
● Mostrar y abogar por las mejores prácticas para acabar con las ETDs.
● Proporcionar una plataforma, como la plantilla de registro ALMA, para apoyar la rendición de cuentas a nivel regional sobre los objetivos alcanzados en materia de ETDs en todos los estados miembros.
● Coordinar, y, siempre que sea posible, armonizar la aprobación e implementación de guías para las herramientas de prevención y tratamiento de las ETDs, a fin de minimizar el tiempo necesario para adoptar nuevos diagnósticos, medicamentos y vacunas.
● Proporcionar una plataforma para la planificación estratégica transfronteriza y la sincronización de intervenciones para contener las ETDs.
● Abogar por el control y la eliminación de las ETDs entre los estados miembros y otros actores clave.
● Proporcionar plataformas para convocar reuniones y foros que promuevan la defensa y las asociaciones para el control y eliminación de las ETDs.
Como Naciones Unidas
Nos comprometemos a proporcionar un liderazgo mundial y abogar por un acceso equitativo a la salud y el desarrollo para las personas y comunidades afectadas por las ETDs, de acuerdo con los principios de los ODS y la cobertura de salud universal, sin dejar nadie atrás.
Como OMS
Nos comprometemos, a través de nuestra red de oficinas de la OMS, a:
● Proporcionar un liderazgo mundial en el campo de la salud, así como una guía y apoyo técnico y programático a los países a la hora de implementar sus programas nacionales de lucha contra las ETDs, tal como lo recomienda la hoja de ruta de las ETDs de la OMS 2030.
● Monitorear y reportar el progreso respecto a los objetivos de la hoja de ruta de las ETDs de la OMS para el 2030.
● Proporcionar una orientación política oportuna como apoyo a un rápido aumento de las intervenciones efectivas de lucha contra las ETDs.
● Desarrollar un monitoreo de calidad y protocolos y guías de evaluación para los programas y los países.
● Verificar, validar o certificar la eliminación y erradicación de enfermedades.
● Usar datos de los sistemas nacionales de información sanitaria como la principal fuente de información para la toma de decisiones.
● Apoyar a los países a la hora de establecer y reforzar sus sistemas de información sanitaria.
Como compañías farmacéuticas y del sector público-privado
Continuamos comprometiéndonos a:
- Prestar apoyo al acceso nacional e internacional a los programas de medicamentos para las ETDs, alineándonos así con la hoja de ruta de las ETDs de la OMS 2030, a través de nuestras donaciones comprometidas de medicamentos y diagnósticos fiables, seguros y efectivos, y gracias a los fondos complementarios de donantes y gobiernos para controlar, eliminar y/o erradicar las ETDs.
- Prestar apoyo a la I&D de nuevos tratamientos y su distribución a las personas y programas con vistas a un aumento proporcional de los mismos que sea seguro y tenga un impacto significativo, tal como se requiere para cumplir los objetivos de la hoja de ruta de las ETDs de la OMS 2030 y más allá.
- Junto con las contrapartes nacionales e internacionales, crear soluciones sostenibles para reforzar los sistemas de salud locales.
- Prestar apoyo a los países para que se apropien de sus programas de ETDs a través del desarrollo de planes nacionales que incorporen programas de lucha contra las ETDs a los sistemas de salud nacionales.
Como donantes
Como donantes del sector público-privado, nos comprometemos a desplegar nuestros recursos técnicos y financieros como apoyo a los países para que puedan alcanzar los objetivos de la hoja de ruta de las ETDs 2030 de la OMS:
● Asociándonos y colaborando con los países endémicos para apoyar sus planes y administración de recursos con el fin de alcanzar objetivos específicos para cada enfermedad, ayudando además a la creación de sistemas de salud resilientes.
● Involucrando a otros donantes para que se sumen a la lucha contra las ETDs e impulsando la coordinación entre donantes bajo el liderazgo de los países endémicos.
● Facilitando la financiación sostenible a través de la colaboración con procesos de financiación nacionales y asegurando que los recursos de los donantes para las ETDs complementen y no menoscaben o sustituyan los recursos de cada país.
● Colaborando con los gobiernos nacionales, los académicos, la OMS y la industria farmacéutica en la financiación de la investigación para conseguir nuevos tratamientos y diagnósticos para acelerar el progreso en la lucha contra las ETDs de acuerdo con las prioridades de los países endémicos.
Como organizaciones multilaterales
Nos comprometemos a:
● Invertir en el refuerzo de los sistemas de salud, continuando nuestro apoyo a la prestación de servicios integrados y la financiación de intervenciones clave que apoyen las intervenciones de lucha contra las ETDs.
● Abogar por unos planes estratégicos nacionales de lucha contra las ETDs robustos e impactantes, apoyando a los países en el desarrollo de sus planes estratégicos nacionales para la eliminación de las ETDs y apoyando a los países a la hora de implementar sus programas de lucha contra las ETDs.
● Movilizar recursos para el apoyo a los programas nacionales de lucha contra las ETDs y el desarrollo de diagnósticos y medicamentos.
● Convertir las ETDs en un pilar del Plan de Acción Global para una Sola Salud (One Health)[12] bajo el paraguas de la Alianza Tripartita Plus (Tripartite Plus Alliance) – la OMS, la Organización para la Alimentación y la Agricultura, la Organización Mundial de Sanidad Animal, y el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente) dentro de un marco más amplio de capacitación, coordinación multisectorial y asignación de recursos.
Como organizaciones no gubernamentales, organizaciones de la sociedad civil y organizaciones comunitarias
Nos comprometemos a:
● Coordinar nuestras aportaciones como contrapartes ejecutoras con los países endémicos para alcanzar los objetivos de la hoja de ruta de las ETDs 2030 de la OMS, incluyendo abogar por un incremento sostenido de recursos nacionales para los programas de lucha contra las ETDs para reforzar su estabilidad financiera.
● Permitir una mayor participación de las comunidades afectadas por las ETDs a todos los niveles desde el diseño de los programas de lucha contra las ETDs, pasando por su implementación, políticas, monitoreo y evaluación.
● Salvaguardar las comunidades afectadas por las ETDs a través de un enfoque de ´no causar daños´ (‘do no harm’) al tiempo que se implica a todos los sectores de estas comunidades en la lucha contra las ETDs y se construyen redes locales de defensores de la lucha contra las ETDs para apoyar los objetivos de movilización social, de recursos, y de defensa.
● Establecer prácticas basadas en evidencias, a su vez basadas en datos robustos para la implementación de intervenciones sostenibles que apoyen sistemas de salud resilientes y programaciones integradas a gran escala y de gran impacto.
● Adoptar un enfoque inclusivo para identificar, implementar, monitorear y evaluar los proyectos y programas de lucha contra las ETDs, considerando aspectos de género, y las necesidades específicas de los diferentes sectores de la población (por ejemplo, personas con movilidad reducida, mujeres, hombres, jóvenes y ancianos).
Como académicos y centros de investigación
Alineando nuestros sectores con la hoja de ruta de las ETDs 2030 de la OMS y trabajando con los países afectados, nos comprometemos a:
● Lanzar una agenda de investigación coordinada y liderada por los países que haga un mayor énfasis en reforzar la capacidad investigadora, la innovación, el acceso y la equidad.
● Fomentar la investigación interdisciplinar (implicando ciencias biomédicas y sociales) para construir un mejor entendimiento en todas las disciplinas en cuestión sobre cómo actúan las ETDs, incluyendo cómo conseguir que programas de lucha contra las ETDs se integren con éxito a los sistemas de salud nacionales y locales, y cómo este conocimiento puede traducirse en políticas y prácticas.
● Implicarse con las comunidades en el desarrollo de intervenciones que puedan responder de forma efectiva a las necesidades complejas de las personas afectadas por las ETDs en sus contextos nacionales y locales y, finalmente, hacer que las acciones de lucha contra las ETDs se conviertan en un vehículo para reforzar los sistemas de salud.
● Promover currículos educativos integrales sobre la prevención, el tratamiento y el control de las ETDs para todos los niveles del desarrollo educativo en todo el mundo, poniendo un foco especial en la capacitación y excelencia de los trabajadores del campo de la salud y la investigación y en la creación de un entorno favorable para la cooperación internacional y así atraer y consolidar una masa crítica de profesionales que trabajen en los países endémicos.
● Abogar por un incremento del gasto en I&D para la salud (público y privado, en proporción al PIB) y del gasto en salud nacional (en innovación en el sector de la investigación y el refuerzo de capacidades), de acuerdo con los ODS.
● Apoyar el desarrollo de mecanismos robustos de monitoreo y evaluación en todos los sectores que puedan medir el impacto de las acciones para controlar, eliminar y erradicar las ETDs.
Como jóvenes
Nos comprometemos a:
● Utilizar nuestra voz para implicar, empoderar y apoyar a la juventud en sus comunidades y a sus líderes – incluyendo jóvenes con discapacidades, de cara a ayudar al lanzamiento de la hoja de ruta de las ETDs 2030 de la OMS y a alcanzar sus objetivos, asegurando de este modo que la juventud no se queda atrás en la lucha contra las ETDs.
● Aportar a la lucha contra las ETDs nuestra creatividad, nuestra energía, nuestro sentido de la innovación, nuestras aptitudes respecto a las nuevas tecnologías, nuestra forma de pensar y nuestro talento.
● Implicarnos con las entidades con poder para tomar decisiones a nivel local, regional e internacional y apoyar sus acciones de testimonio y la aplicación de la hoja de ruta de las ETDs 2030 de la OMS.
● Promover y adoptar prácticas de salud que prevengan las ETDs y apoyar la salud mental y el bienestar.
[1] Por ‘acabar con las ETD’ queremos decir que podamos controlar, eliminar o erradicar las ETDs, tal como destaca la hoja de ruta de las ETDs de la OMS para el 2030.
[2]La Declaración de Londres sobre las ETDs: https://unitingtocombatntds.org/resource-hub/who-resources/london-declaration-neglected-tropical-diseases/
[3]Hoja de ruta de la OMS para 2012–2020:https://www.who.int/neglected_diseases/NTD_RoadMap_2012_Fullversion.pdf
[4] Por ´libre de ETDs’ queremos decir que podamos controlar, eliminar o erradicar las ETDs, tal como destaca la hoja de ruta de las ETDs de la OMS para el 2030.
[5] Por ‘acabar con las ETD’ queremos decir que podamos controlar, eliminar o erradicar las ETDs, tal como destaca la hoja de ruta de las ETDs de la OMS para el 2030.
[7] Hoja de ruta de las ETDs de la OMS 2030 y documentos adjuntos: https://www.who.int/publications/i/item/9789240010352
[8]https://sdgs.un.org/2030agenda
[9]Por ‘acabar con las ETD’ queremos decir que podamos controlar, eliminar o erradicar las ETDs, tal como destaca la hoja de ruta de las ETDs de la OMS para el 2030.
[10] Por ‘acabar con las ETD’ queremos decir que podamos controlar, eliminar o erradicar las ETDs, tal como destaca la hoja de ruta de las ETDs de la OMS para el 2030.
[11]Ibid.
[12]https://www.who.int/groups/one-health-high-level-expert-panel